Hoy voy a escribir un post en plan relax, estamos a las puertas de la vacaciones y no me apetece profundizar demasiado en materia.
¿Qué quieres ser de mayor?
¿Quién no ha hecho o a quién no le han hecho esa pregunta alguna vez?
Pues bien, yo la catalogaría como una de las preguntas del millón, sí sí, de las que a todos nos gustaría saber la respuesta, pero seguramente una de las más difíciles de responder, de responder con firmeza, seguridad, vocación.
Yo cuando era pequeñito siempre decía que quería ser futbolista, como la inmensa mayoría de los niños de este país pero
a medida que vas creciendo te vas encontrando con ciertas limitaciones, normalmente insalvables para poder ser futbolista que era lo que tu más deseabas, por lo que el fútbol pasa a el plano de “aficionado” y te centras más en otras cosas que si puedas aprovechar para ser alguien el día de mañana.
Pero cuando llega el momento de elegir, a mi modo de ver, demasiado pronto, porque estás en una edad muy mala, tienes un desorden total en tu cabeza, lo único que te apetece e importa es estar con tus “coleguillas”, salir a dar una vuelta, perseguir a las chicas ( sin ningún tipo de éxito ) y sobre todo un gran desconocimiento de lo que te espera ahí fuera, de las miles de posibilidades que tienes para elegir, de lo mucho que te lo vas a tener que currar si quieres llegar a algo y de lo que puede influir en el resto de tu vida tomar las decisiones correctas sin olvidarnos del factor suerte, también importante donde los haya, en definitiva, no tienes ni la más mínima idea de que vas a hacer.
Bueno para aligerar un poco, creo que para tomar una de las decisiones más importantes de tu vida deberíamos tener algo más de tiempo y saber que es lo que realmente nos gusta y nos llena. Con esto quiero decir que a mí me sucedió cuando descubrí la figura del Analista Web (unos cuantos años más tarde de la fecha en la que me hice esa pregunta) y un escalofrío me recorrió todo el cuerpo, tuve una sensación de felicidad que no podría explicar, pero ahora sé que ésto lo que quiero ser, y como dice el dicho más vale tarde que nunca.
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